Plato de servicio redondo de porcelana blanca con decoración oriental bajo esmalte, 4 piezas.
Ligereza, fuerza y brillo: estas son las señas de identidad de este juego de vajilla que adquiere formas elegantes, sinuosas y contemporáneas. Por primera vez las decoraciones sustituyen al clásico blanco para una porción de creatividad formada por sinergias explosivas y juegos de color.