Cazuela baja redonda de cobre martillado a mano con asas de latón de 20 cm fabricada en Italia.
Esta
cazuela baja creada íntegramente en
cobre macizo martillado y enlatado a mano al fuego es ideal para cocinar caldos con tomates, panecillos, cordero, pollo, conejo, chicharrones y cocción lenta en general. Los mangos son de
latón macizo ensamblados con remaches de 5 mm. Posibilidad de elegir
con o sin tapa. El
diseño funcional y elegante
representa una pieza única , ya que el objeto proviene de un procesamiento de cobre
artesanal según la tradición italiana , realizado durante siglos con la máxima atención al detalle y la maestría inalterada de los caldereros.
Cazuela: martillada a mano
Posible
tapa : martillada a mano
En pleno respeto de la
tradición y la
calidad italianas, la
producción totalmente manual es el resultado de una fuerte síntesis entre la
pasión y el arte que da vida a un
objeto único y precioso. De excepcional calidad y refinamiento, cada objeto y cada uno de sus detalles son el resultado de un cuidadoso procesamiento realizado estrictamente a mano por maestros caldereros.
Los utensilios de cocina de cobre para uso culinario, de hecho, están totalmente
modelados a mano a través de
golpeando en postes de hierro específicos con mazos de madera y martillos especiales para pequeñas producciones, o con el torno para las más grandes.
Esta técnica de procesamiento le da al cobre un aspecto estéticamente embellecido, pero sobre todo lo hace más
resistente al desgaste , para un efecto de endurecimiento molecular.
Posteriormente, cada producto se
enlata a mano sobre el fuego, distribuyendo manualmente el estaño fundido dentro de los utensilios de cocina, para que sea seguro e higiénico.
Finalmente, la limpieza y pulido se realiza manualmente con productos biodegradables, y finalmente el pulido mediante cepillado hasta obtener un brillo total.
Donde sea necesario, los mangos se fijan con remaches, para asegurar un agarre fuerte y duradero.
Todas estas características lo convierten en una herramienta indispensable en particular para todos aquellos interesados en la alta cocina.
La elección de los materiales es el primer punto de partida importante: se realiza una selección diligente para elegir solo
materiales de excelente calidad. Entonces, el cobre utilizado es cobre puro, con las cualidades físicas adecuadas para un modelado perfecto. El latón para los mangos proviene de lingotes individuales de primera elección para fundición artesanal y el estaño utilizado es 100% virgen puro apto para uso alimentario, en cumplimiento de la normativa y con certificado de análisis.
El material: El cobre fue el primer metal trabajado por el hombre. Es un
metal noble prácticamente indestructible y de alto valor ecológico. Es por eso que poseer un utensilio de cocina de cobre puede significar poseer una parte de la historia humana, lo que aporta alegría y encanto en la preparación de las comidas y en la presentación de los platos.
El cobre es apto para cocciones prolongadas y precisas debido a su
conductividad térmica que permite que el calor se distribuya uniformemente por toda la olla y tapa para que, una vez alcanzada la temperatura deseada,
se obtengan ahorros energéticos ya que requiere poco calor.
Advertencias y características técnicas:- Se puede utilizar para cocinar a gas, radiante o eléctrico, preferiblemente con llamas bajas;
- No utilice objetos puntiagudos en contacto directo con el interior, recomendamos cubiertos de madera para evitar rayones en el estañado;
- No utilice estropajos de lana de acero para la limpieza interior, con el fin de evitar la extracción de la lata;
- No se recomienda lavar en el lavavajillas para evitar la oxidación completa del cobre;
- No deje el instrumento en contacto directo con llamas o platos sin alimentos o condimentos en su interior;
- No apile las bandejas una encima de la otra; es recomendable colgarlos.
NB: Con el uso continuado, el cobre adquirirá su característico
color antiguo . Para aquellos que prefieren el cobre brillante, se recomienda utilizar (solo en el exterior) la solución de vinagre y sal y frotar con lana de acero, o productos de limpieza de cobre, fácilmente disponibles en el mercado. El estanque también tenderá a oscurecerse, pero esta reacción natural no afecta su higiene. Si el recubrimiento del estañado deja de ser uniforme, será imprescindible proceder con un nuevo estañado para lo cual se puede contactar directamente con el proveedor o expertos del sector. Con las precauciones correctas indicadas anteriormente, el estañado puede durar hasta 9/10 años.
La posibilidad de estancar periódicamente el interior y pulirlo externamente hace que el
contenedor sea eterno : por eso estas herramientas se transmiten a menudo de
generación en generación.